Temperatura y luz para las clivias
Originalmente, las clivias son plantas de sombra. La Clivia funciona bien en todos los lugares, pero nunca debe estar directamente expuesta al sol.
Agua y nutrición de la Clivia
Una Clivia es muy fácil de mantener y requiere un riego moderado. Regarla una vez a la semana y mantener la tierra un poco húmeda es suficiente. En el periodo de invierno, regarla una vez cada dos semanas será suficiente.
Nutrición
Debido al lento crecimiento de la Clivia, fertilizarla un par de veces al año es suficiente. Te recomendamos que replantes tu Clivia después de 2 años. Esto es necesario para que las raíces tengan más espacio. Para hacer esto se puede utilizar cualquier tierra normal para macetas.
Clivia, ¿qué ocurre después de la floración?
Periodo de descanso
Para obtener la floración, la Clivia debe tener un período de descanso que estimule el desarrollo de los brotes. El período de descanso natural de una Clivia es el invierno. Para tener garantizada una buena floración puedes intercalar un período de descanso para, a continuación, poner tu Clivia miniata durante dos meses en un ambiente con una temperatura de 5 a 12 grados centígrados. Durante ese periodo, la planta necesita poca luz y también muy poca agua. Será suficiente con que la tierra se mantenga ligeramente húmeda.
Para obtener la floración, la Clivia debe tener un período de descanso que estimule el desarrollo de los brotes. El período de descanso natural de una Clivia es el invierno. Para tener garantizada una buena floración puedes intercalar un período de descanso para, a continuación, poner tu Clivia miniata durante dos meses en un ambiente con una temperatura de 5 a 12 grados centígrados. Durante ese periodo, la planta necesita poca luz y también muy poca agua. Será suficiente con que la tierra se mantenga ligeramente húmeda.
Después de este período de descanso, el tallo crecerá y aparecerá un brote. Después de la floración, el tallo se puede romper o cortar. Este proceso se puede repetir muchas veces.